jueves, 21 de marzo de 2013

Mes 11 Año 0

...y tal sólo una semana más tarde aprendió a sentarse.

La primera vez que fui a ponerle el chupete a media noche y toqué su pelo a una altura inesperada casi se me salta el corazón del pecho. No sé como ocurrió, pero al cabo de un par de días ya rebuscaba él mismo en el cajón de los juguetes e iba recolocándose de tumbado a boca arriba a boca abajo, a sentado y casi de pie a una velocidad de vértigo.

Tiene dientes asomando arriba ya, la yema de huevo no esconde secretos y parece que dice "hola" de vez en cuando, pero creo que lo más impactante es su manera de agarrarse a las cadenas del columpio y sonreír al caer por el tobogán, ver que comienza a entender cuando le dices que te dé algo, que busque el león en su alfombra de juegos cuando le preguntas ¿dónde está el león?, o que sencillamente se abalance hacia el inalámbrico por si la voz del otro lado del manos libres es alguien conocido...
 
Hoy empieza la primavera, dentro de cuatro días será Semana Santa y nos acercaremos al añito, ese momento en el que toda la vida recordarás si ya andabas, hablabas, comías solo.... Un milestone, el primero, una fecha verdaderamente importante entre tantas que sí deberemos recordar para siempre...

martes, 12 de marzo de 2013

La bolsa de "dar una vuelta" con comida

Una de las cosas que nunca piensas que echarás de menos es salir de trabajar un viernes, y sin pasar por casa, bajar a deambular por el centro, a lo que surja, y cenar algo por ahí. Hacer eso ahora es algo más complicado...

Depende de si son las 4 o las 5 cuando sientes esa irrefrenable necesidad de salir a la aventura, el bebé necesita merendar (la fruta), que puede ser un potito de los mil que hay, pero es que a las 7:30 -8 de la tarde te pedirá la cena, y a buscar por ahí otro potito de nuevo.... En fin, está bien para una emergencia, pero lo normal será que no te apetezca darle comida prefabricada cada vez que te apetezca darte una vuelta, sobretodo si no eres de pasarte el fin de semana en casa...

Por eso la primera inversión es una bolsa térmica de un tamaño razonable, en el que llevar siempre unas medidas de leche en polvo y cereales para hacer una papilla donde pille, un bol de plástico y una cuchara adecuada de la que le guste para comer, unos baberos de papel o tela, unas cuantas servilletas de papel, una mini fiambrerita con unas galletitas de bebé por si aprieta el hambre entre horas, y un botellín de agua. Si toma biberón, pues un bibe vacío también. Y luego la comida, o merienda o cena preparadita en un termo de sólidos de 300 ml, (o los potitos necesarios). Solemos llevar también un yogur y una mandarina o algo así de postre, y un potito de fruta por si ocurre que se queda con hambre.

Eso y un buen paquete de toallitas es todo lo necesario para poder salir así improvisadamente una tarde de estas, o una mañana, y aunque parece bastante en realidad si vas reponiendo todos los consumibles no se tarda mucho en estar en la calle, ahora sí, pasando por casa siempre, y descartando el cine del plan, al menos durante algún tiempo... 

Y sobretodo, sobretodo, invertir en un carrito totalmente reclinable para que pueda quedarse roque tras su cena y dejar a los papás cenar por ahí, que también tienen derecho, ¿no?

(... y un truquito: si hay que pasar una noche fuera en un hotel, recordar que no hay microondas disponible a las 3 de la mañana, ni posiblemente nada abierto, así que una forma de ahorrar la pasta y el trasto del calienta-biberones es añadir a la bolsa un buen termo de líquidos y pedir que te hiervan el agua durante la cena que pondrás dentro, y así te aguanta calentita hasta el desayuno.... En el Decathlon mismo los venden por no tanto y van muy bien)

lunes, 11 de marzo de 2013

Reptando hacia la videoconferencia

Supongo que sólo le hacía falta un estimulo suficientemente poderoso... De repente, hace 3 días, vió el portátil en el suelo y plantó las palmas sobre el parqué, levantó la cabeza y empezó a reptar, cada vez más rápido, hasta alcanzarlo y aporrear las teclas con una carcajada de victoria.

Luego lo cambiamos de sitio, a ver si era casual, y no, seguía persiguiendo el portátil, luego el inalámbrico... parece que la tecnología es lo que - con 10 meses- hace que levante el culete y empiece a gatear. Podría ser amable y decir que es el ansia de ver a la abuela al otro lado de la pantalla, y tal vez no me equivoque, pero lo más probable es que sencillamente, sea de verdad eso que llaman un nativo digital.

En sólo 3 días ya lo hace casi de forma automática, y sus intereses ya incluyen sus juguetes, la otra pata de la silla, el final de la alfombra... Su mundo acaba de expandirse otra vez, y casi sin tregua empieza a demostrar interés por ponerse de pie y por montar los mega blocks: me da la sensación de que empieza el buen tiempo y el pequeñito se está activando para disfrutarlo con todas sus fuerzas. Si hasta le llevamos a los columpios por primera vez y diría que se columpiaba sólo.....

domingo, 3 de marzo de 2013

ma - ma

Y de repente ocurrió... Tras un fin de semana estupendo, yendo a recoger caramelos por Sant Medir en Gracia, ver localizaciones por los jardines de Palau Reial y disfrutando de los primeros soles tras el frío intenso de las últimas semanas, Cat se ha decidido a incluir la m en su ya extenso abanico de consonantes, y alto y claro ha pronunciado ese esperado ma-ma-ma-ma.....

Bueno, una cosa menos. 10 meses camino de 11, dos dientes, levantamos ya el culete pero con las piernas cruzadas, aún no nos lanzamos a gatear, ni mucho menos levantarnos del suelo, porque su equilibrio en postura sentada es tal que no se cae ni para atrás el petardo, y claro, el que no se cae, no aprende a levantarse.... Eso sí, es capaz de tirarnos la pelota y de comer trocitos minúsculos de manzana, y recogerlos cuando se le resbalan entre los dedos.. y sigue calando a todo el mundo a los 10 segundos de la primera sonrisa...